Soy un entusiasta del MATRIX X-SABRE 3. Por su enorme transparencia y sentido del detalle —en definitiva, por su
realismo. Nada que ver, según mi parecer, con sus equivalentes de TOPPING. No hay en el MATRIX ningún atisbo de frialdad, a pesar de su capacidad analÃtica. Ciertamente, no posee la nÃtida
calidez de, por ejemplo, un M2TECH Young III —del que también soy un
fan. Pero, el MATRIX lo
supera en microdinámica... lo cual, para mà es esencial si se trata de captar las inflexiones propias de los interpretes de clásica. Ambos los tengo conectados al combo OOR-HYPSOS. Transparencia (MATRIX) + transparencia (OOR)=
cristal japonés... que para las lentes es el mejor. O eso dicen. Sea como sea, imbatible. O casi. Sobre todo, porque
tanta transparencia nunca cae en lo "analÃtico".
Pues bien, me he pasado prácticamente el dÃa "escuchando" este combo con el cable usb de GEKKO. Desde hace meses, tengo conectado el MATRIX —con el SPDIF 3 de por medio— al Macbook a través de un CARDAS CLEAR (superspeed).... del cual estoy muy satisfecho. Ya sé que esto de los cables implica, por lo común, entrar en polémica. Pero, sean o no controles de tono solapados, lo cierto es que la diferencia se nota. Aunque en muchos casos sea sutil. Y lo primero que me ha soprendido del cable de GEKKO —una sorpresa que se ha mantenido a lo largo del dÃa— es la
naturalidad con la que presenta la música. El CARDAS CLEAR también es
natural, aun cuando
añada una punta de vivacidad que en el GEKKO está ausente... al menos, de momento. Pero, al compararlos, no sé hasta qué punto esta punta es un tanto
artificial o forzada. Con el GEKKO todo los diferentes elementos de la escena sonora fluyen, como decÃa, con una enorme naturalidad... lo que contribuye a
integrar, aun en mayor medida, la certera
disección que lleva a cabo el MATRIX. No me atreverÃa a decir cuál de los dos cables es
mejor, si es que tiene sentido decirlo. A veces, prefiero la vivacidad y la amplitud del CARDAS CLEAR, la cual es muy diferente a la de los cables de AQ. Pero, al final, quiero volver a escuchar con el GEKKO. En cualquier caso, vamos a
quemarlo un poco más... si es que la
quema aquà sirve de algo. Pero, de servir, dudo que cambie esta primerÃsima impresión relativa a la naturalidad.
Por ejemplo, me ha llamado mucho la atención cómo el GEKKO traduce los segundos iniciales de la primera pista del disco de Joel Frederiksen,
Orpheus, I am —
https://open.qobuz.com/album/hx27mqgn92u3b—. Es un disco
en directo... aunque, por lo común, no lo parece. De entrada, hay un rumor de fondo —el del "público" o los técnicos— que difÃcilmente suele percibirse. Y cuando el equipo logra traducirlo... la sensación, por lo común, es la de un rumor
aparte. Con el GEKKO, sin embargo, este rumor
envuelve a Frederiksen. Sencillamente, estás ahÃ. Ninguna exageración —ningún acento fuera de lugar. Es como si el GEKKO pusiera encima de la mesa los diferentes platos de una cena... con la profunda convicción de que te gustarán. Al menos, la sinergia con el combo MATRIX-OOR es innegable.
Para mà está resultando todo un descubrimiento, sin duda. Más que nada, por comentar.
saludos cordiales