Seguimos disfrutando de la música y del cacharreo. He añadido el Wyred 4 Sound µDAC que incorpora el DAC de Sabre 9023 y tres entradas, una USB para conectarlo al ordenador y otras dos ópticas, una coaxial y otra óptica. Usando la coaxial he podido conectar el reproductor de CD NAD T 562, ya que como el X-CAN V8p sólo tiene una entrada de lÃnea, si querÃa usarlo tenÃa que conectar y desconectas los cables RCA de la parte trasera.
El nuevo DAC suena muy bien, aunque aún no sabrÃa decir si mejor que el HRT microStreamer, yo creo que andan muy parecidos en rendimiento. Quizá algo más de detalle y limpieza en el sonido, y un puntito más cálido, pero todo lo que comento es muy sutil.
Sà que he probado a comparar la reproducción del último CD que he comprado de Andrea Motis & Joan Chamorro.
- Por una parte he comparado la reproducción con foobar2000 del CD convertido en formato FLAC con la reproducción del CD fÃsico en el NAD T562 usándose sólo como transporte, conectado al DAC de Wyred 4 Sound µDAC por coaxial. El sonido es idéntico, algo que por otra parte me esperaba, pues el transporte no debiera modificar la señal que llega en formato digital hasta el DAC.
- Por otra parte he comparado la reproducción con foobar2000 del CD convertido en formato FLAC con la reproducción del CD fÃsico en el NAD T562, pero en este caso conectado por RCA al X-CAN V8p, usándose el DAC Wolfson del reproductor. El sonido es más cálido con el reproductor y para mi gusto algo más agradable, no hay una gran diferencia pero en este caso sà que me resulta apreciable.
Me queda recibir una pareja de válvulas NOS Philips JAN 6922 para seguir investigando en cómo afecta al sonido del X-CAN V8p. Ahora mismo tengo puestas unas NOS Voshkod 6H23N EB y me gusta bastante cómo suena, pero después de leer las opiniones de Paco de cables Hamlet acerca de esas NOS Philips JAN 6922 y estando tan bien de precio
en eBay a 35,80€ la pareja puesta en casa, me he decidido a probarlas.
El cambio de válvulas es algo realmente divertido y una forma diferente de buscar un sonido distinto de forma sencilla. Me gusta el sonido valvulero, algunos le llamarán dulzón, pero busco alejarme del sonido excesivamente brillante y cristalino, que inicialmente es muy sorprendente pero luego me resulta más pesado y fatigoso. Ojo, que renunciar a ese sonido cristalino no significa renunciar al sonido detallado, todo lo contrario. Me encanta el detalle, pero con un punto de calidez que me haga más agradable la escucha.
Pero los reyes de la fiesta siguen siendo los Sennheiser HD 650. Cada dÃa que pasa me gustan más.